El Día Mundial en Recuerdo a las Víctimas por Accidentes de Tráfico, celebrado el pasado 17 de noviembre, subraya la importancia de reducir a cero el número de fallecidos en carretera. Sin embargo, a pesar de los avances tecnológicos en materia de seguridad vial, el 67% de los conductores no utiliza los sistemas de ayuda a la conducción que incorporan sus vehículos, salvo que estos estén activados automáticamente.
La paradoja resulta preocupante: mientras los fabricantes automovilísticos desarrollan tecnologías cada vez más sofisticadas para detectar riesgos y prevenir accidentes, gran parte de los conductores aún no confía en ellas. Un ejemplo notable es la estrategia presentada por Grupo Renault, cuyo programa de seguridad vial busca no solo prevenir accidentes, sino también minimizar sus consecuencias.
Innovación al servicio de la seguridad vial
El programa de Renault se apoya en tres pilares fundamentales: detectar, guiar y actuar, una estrategia holística que demuestra la importancia de las nuevas tecnologías:
Detectar e informar: el safety score
Este sistema utiliza datos recopilados por los sensores del vehículo para analizar la conducta del conductor. Evalúa factores como velocidad, trayectoria, distancia y atención al volante, y asigna una puntuación de seguridad entre 0 y 100 al final de cada trayecto. A través de esta evaluación, el sistema ofrece consejos personalizados para mejorar la seguridad en la conducción.Guiar: el safety coach
Basándose en la información del safety score, el safety coach proporciona recomendaciones en tiempo real al conductor. Utilizando la pantalla integrada del vehículo, identifica riesgos como exceso de velocidad, trayectorias incorrectas y distracciones al volante. Además, gracias a la Inteligencia Artificial, evalúa continuamente el entorno y el comportamiento del conductor para alertar sobre situaciones de riesgo inmediato.Actuar: el safety guardian
Este sistema recopila toda la información del vehículo y del entorno (comportamiento del conductor, condiciones meteorológicas y de la carretera, navegación, etc.) para actuar directamente sobre el vehículo. De esta forma, el safety guardian complementa los dos sistemas anteriores, ofreciendo un control proactivo en situaciones críticas.
Más allá de la prevención: otras tecnologías innovadoras
El compromiso de Renault con la seguridad vial no termina aquí. La compañía integra radares, cámaras e Inteligencia Artificial para asistir a los conductores en tiempo real y anticipar posibles siniestros. Además, ha desarrollado:
- ROADS, el simulador de conducción más avanzado del mundo. Esta herramienta tecnológica permite probar el comportamiento de los vehículos en diversas condiciones, ayudando a anticipar y corregir riesgos en carretera.
- SD Switch, un sistema que desconecta la batería de alta tensión del vehículo de manera segura. Diseñado para facilitar la labor de los servicios de emergencia tras un accidente, este interruptor es accesible sin necesidad de herramientas especiales.
¿Por qué los conductores ignoran estas tecnologías?
A pesar de su capacidad para salvar vidas y prevenir accidentes, los sistemas de ayuda a la conducción no son utilizados por el 70% de los conductores. Esta resistencia puede atribuirse a diversos factores: desconocimiento, falta de confianza en la tecnología o una percepción errónea de control al volante.
Sin embargo, la evidencia es clara: desde 1970, las innovaciones desarrolladas por Renault han permitido salvar 350.000 vidas y evitar que 5,8 millones de personas resulten heridas. Ignorar estas herramientas es perder la oportunidad de contar con un asistente tecnológico que puede marcar la diferencia entre un trayecto seguro y un siniestro.
Un futuro más seguro al alcance de todos
El reto actual no reside únicamente en desarrollar nuevas tecnologías, sino en concienciar a los conductores sobre la importancia de utilizarlas. A medida que los sistemas avanzan, se convierten en aliados indispensables para mejorar la seguridad en carretera.
Con programas como el de Renault, que combina la detección, la guía y la acción, la meta de reducir a cero las víctimas de accidentes de tráfico está más cerca. Pero para lograrlo, es esencial que los conductores adopten y confíen en estas innovaciones tecnológicas, garantizando así una conducción más segura y responsable.