Primero fueron los japoneses, más tarde llegaron los coreanos… y ahora, los fabricantes chinos aterrizan con fuerza en el mercado español. Esta tendencia no es una mera anécdota: el parque automovilístico en España se vuelve cada vez más heterogéneo y obliga a proveedores, distribuidores y talleres a adaptarse a un escenario en constante transformación. Quien no entienda esta dinámica, corre el riesgo de quedarse al margen.
Un mercado dominado por Asia
Lejos quedan los años en los que marcas como Citroën, Renault, Seat o Peugeot ejercían un dominio casi absoluto. Ahora, con Toyota consolidada como la marca más vendida, y el consorcio Hyundai-Kia pisando fuerte en el podio, más del 70% de los coches del Top 10 de ventas en España en julio fueron de origen asiático, incluyendo el MG ZS, el SUV chino que se ha convertido en todo un superventas.
MG, el caso más revelador
Si antes se dudaba de la aceptación europea del producto chino, las cifras hablan por sí mismas. MG ha pasado de matricular 764 unidades en 2021 a 29.048 en 2023, y para finales de 2024, podríamos contar con alrededor de 70.000 vehículos MG circulando por las carreteras españolas. Su progresión es un ejemplo claro de cómo estas nuevas marcas han calado en el consumidor, lejos de ser opciones marginales.
Y no están solos: Omoda (3.369 unidades vendidas hasta julio) supera a marcas tan reconocidas como Alfa Romeo (2.021) u Honda (2.279), mientras que BYD y Lynk & Co empiezan a consolidarse con 1.473 y 880 unidades respectivamente. Además, enseñas como Aiways, DFSK, DongFeng, DR, Seres, Skywell, SWM o Yudo comienzan a marcar su impronta, aunque aún en cifras más discretas.
La respuesta de los fabricantes chinos
El interés del público ha motivado que Chery, BYD, SAIC (MG), Leapmotor y Dongfeng muestren su intención de fabricar vehículos directamente en Europa, tanto para sortear aranceles como para asegurar un suministro constante de coches y recambios. Chery, por ejemplo, ya ha anunciado su intención de producir Omoda y Jaecoo en la Zona Franca de Barcelona, una clara apuesta por el mercado local.
Un hito logístico en Santander
La llegada del Explorer No. 1, un buque gigante de BYD, al puerto de Santander, marca otro punto de inflexión. Esta embarcación permitirá importar hasta 7.000 vehículos en cada viaje, además de recambios, con el objetivo de reducir esperas y optimizar la logística. Un millar de unidades del BYD Seal U DM-i, un híbrido enchufable, han desembarcado por primera vez en España, reflejando el creciente interés por la movilidad electrificada a precios competitivos.
¿Qué significa esto para la posventa?
El auge de las marcas chinas implica un nuevo nicho de negocio para el aftermarket independiente. Aunque la menor red de concesionarios oficiales pueda parecer una dificultad, en realidad abre nuevas oportunidades para talleres, distribuidores y fabricantes de recambios que estén dispuestos a adaptar sus catálogos y servicios a esta nueva demanda.
La conclusión es clara: la expansión de los coches chinos en el mercado español ya es una realidad. Comprender esta tendencia, y prepararse para ella, será clave para cualquier profesional que quiera seguir siendo competitivo en un contexto cada vez más globalizado.