En un entorno marcado por la incertidumbre en el mercado de vehículos eléctricos (VE), grandes compañías del sector automotor están revisando sus planes de electrificación para los próximos años. Aunque la mayoría mantiene sus objetivos a largo plazo, varios proyectos han sufrido retrasos y ajustes significativos. Estos cambios reflejan los desafíos que enfrenta la industria en su transición hacia una movilidad completamente eléctrica, prevista para la próxima década.
Stellantis: objetivos claros, pero con ajustes
Stellantis sigue comprometida con su meta de comercializar únicamente vehículos eléctricos en Europa para 2030, como parte de su plan estratégico "Dare Forward 2030". Sin embargo, ha comenzado a revisar algunas inversiones importantes. Un ejemplo es la pausa en los proyectos de gigafactorías en Alemania e Italia, desarrollados en colaboración con Mercedes-Benz y Total Energies.
Además, se han registrado reducciones en la producción de vehículos eléctricos, como en el caso de Fiat Italia, que disminuyó su fabricación en un 36% durante el primer semestre de 2024. Otro ajuste significativo es la reducción del turno nocturno en la planta de Stellantis Vigo, a partir de septiembre. A pesar de estos desafíos, la compañía sigue formando alianzas estratégicas, como las establecidas con CATL y el CEA francés, y mantiene en operación sus instalaciones de ensamblaje de pilas en Madrid.
Grupo Volkswagen: equilibrio entre electrificación y combustión
Volkswagen mantiene su compromiso de ser 100% eléctrico en Europa para 2035, pero ha modificado su enfoque estratégico. En julio de 2023, la empresa anunció una inversión en tecnologías de motores de combustión, destinando un tercio de su presupuesto de 180.000 millones de euros a este campo. Además, el proyecto de vehículo autónomo Trinity ha sido pospuesto hasta 2032, priorizando el lanzamiento de un modelo más accesible, un Golf eléctrico, para 2029.
Con la vista puesta en ofrecer opciones más económicas, Volkswagen planea lanzar un modelo eléctrico de 20.000 euros para 2027. A pesar de estos ajustes, el grupo sigue impulsando la electrificación, aunque algunas marcas, como Audi y Porsche, han reconsiderado sus plazos y estrategias, adaptándose a las condiciones del mercado.
Mercedes-Benz: metas revisadas con enfoque en la demanda
Mercedes-Benz, parte de la joint venture Automotive Cells Company, también ha mostrado un enfoque más cauteloso en su transición hacia los vehículos eléctricos. Inicialmente, la compañía se había propuesto que el 50% de sus ventas fueran de vehículos electrificados para 2025 y alcanzar el 100% para 2030. No obstante, en febrero de 2024, revisó sus metas, ajustando sus expectativas para que las ventas de vehículos eléctricos e híbridos representen el 50% del total en 2030.
Renault y Nissan: firmeza en sus planes de electrificación
En contraste con otros grandes actores, el Grupo Renault mantiene sin cambios su objetivo de vender únicamente vehículos eléctricos en Europa para 2030. Nissan, su socio estratégico, también sigue avanzando hacia la electrificación, sin haber anunciado retrasos en sus proyectos.