lunes, 12 de febrero de 2024

Los españoles que quieren cambiar de coche apenas piensan en el eléctrico


Solo un 18,3% de los conductores en España piensa en cambiar de coche en los próximos 12 meses, y de ellos apenas el 6,6% tiene un vehículo eléctrico en mente como su primera opción. Son los datos de la última encuesta realizada a 3.000 personas por el último Observatorio RACE de Conductores, en la que un 68% de los encuestados asegura que no cambiará de vehículo en 2024.

Motivos alegados para cambiar de coche

Para el 34,7% de los consultados resulta problemático que con su coche actual no pueda circular por las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), mientras que un 32% asegura que le guste renovarlo cada cierto tiempo. Por último, un 22,7% afirma que tiene que reemplazarlo porque el que tiene es antiguo, está averiado o es inseguro.

Del total de conductores encuestados que va a cambiar de coche, el 42,1% afirma que lo hará por uno nuevo, mientras que un 30,9% escogerá un vehículo de segunda mano. El resto aún no lo tiene decidido.

En cuanto al tipo de motorización, el 22% se decantará por un híbrido no enchufable (en la encuesta de 2020 no estaba entre las opciones de compra), la segunda opción será un diésel, apoyada por el 21,7% de los conductores (en la encuesta de 2020 eligió esta opción el 33,4% de los encuestados); mientras que el 18,4% escogerá un vehículo de gasolina (un 23,7% lo hizo en 2020), y un 15,5% está indeciso (un 8,6% en 2020).

 

Sin embargo, la opción del vehículo eléctrico se desinfla respecto a lo manifestado en el estudio de 2020, cuando un 7,3% se decantaba por esta opción y ahora, sólo un 6,6% es partidario de esta alternativa.

Por edades, los conductores de entre 25 y 50 años se decantan con mayor fuerza por el diésel, en cambio, los mayores de 50 años por alternativas como motores híbridos y eléctricos.

 

En contra del vehículo eléctrico


La limitación de autonomía (95,1%), el precio del vehículo (81,8%), y la distribución geográfica junto al limitado número de puntos de recarga (74,8%) hacen que los conductores no se decidan por el coche eléctrico como alternativa firme a los vehículos de combustión.