La revista de la Dirección General de Tráfico (DGT) ha difundido los resultados de una encuesta que arroja luz sobre los hábitos de movilidad y consumo energético de los conductores españoles. Según los datos recopilados por la encuesta realizada por Plenoil, aproximadamente uno de cada dos conductores en España no tiene intenciones de adquirir un vehículo eléctrico en los próximos años.
El estudio desveló una serie de razones detrás de esta renuencia hacia los automóviles eléctricos. En primer lugar, el 61% de los encuestados señaló el alto precio de estos coches como un motivo significativo para descartar su compra. A esto se suma la preocupación por la escasez de puntos de recarga, citada por el 46% de los participantes. Otras razones desalentadoras incluyen el tiempo de carga, mencionado por el 35% de los entrevistados, y el coste de la electricidad, que influye en la decisión del 32%. Además, una notable proporción, el 27%, expresó la opinión de que para ellos los vehículos eléctricos no representan el futuro de la movilidad.
Por otro lado, el estudio también reveló que alrededor del 40% de los encuestados está considerando la posibilidad de adquirir un vehículo eléctrico, aunque todavía tienen dudas al respecto. Solo un modesto 10% de los encuestados afirmó estar seguro de que compraría un vehículo eléctrico en el futuro. En términos regionales, los vascos, cántabros y gallegos parecen ser los menos inclinados a contemplar la compra de un eléctrico.
Asimismo, los resultados del estudio también señalaron una visión crítica sobre la insuficiente infraestructura de recarga para vehículos eléctricos en España. Un expresivo 70% de los entrevistados consideró que la red de recarga actual es insuficiente, mientras que un 15% la consideró adecuada para entornos urbanos, pero insuficiente para viajes de larga distancia.
En conclusión, los resultados subrayan que, a pesar de la actual tendencia hacia la electrificación del automóvil, los vehículos de combustión interna siguen siendo la opción dominante para la mitad de los hogares en España. Los coches diésel (49%) y de gasolina (44%) continúan siendo los medios de transporte más comunes entre los conductores del país, mientras que los coches híbridos (9%) y eléctricos (3%) son las alternativas menos elegidas.