En respuesta a la entrada en vigor del Real Decreto-ley 4/2023, que establece medidas para la prevención de riesgos laborales en episodios de altas temperaturas, Conepa (Confederación Española de Talleres de Reparación de Automóviles), entidad a que pertenece ASBOC, anunció que está estudiando en profundidad la implicaciones de esta nueva normativa en el sector. Sin embargo, de manera urgente, la organización ha adelantado una serie de consejos destinados a los talleres con el objetivo de minimizar los riesgos asociados a las altas temperaturas.
El primer y más importante consejo que Conepa destaca es la necesidad de contactar con los Servicios de Prevención Ajenos. Estos servicios deberán evaluar los riesgos específicos de cada taller y determinar las medidas preventivas necesarias para minimizar el estrés térmico causado por las altas temperaturas. Cabe señalar que cada taller tiene sus particularidades y que las medidas preventivas deben adaptarse a cada caso concreto.
Además, desde el Área de Prevención de Riesgos de Conepa se sugieren otras alternativas para ayudar a reducir los riesgos relacionados con el calor en los talleres:
- Ajustar los horarios de trabajo: Se recomienda modificar el horario de apertura del taller para aprovechar las primeras horas del día, cuando las temperaturas suelen ser más bajas. De esta manera, se evitará trabajar durante las horas centrales del día, cuando el calor es más intenso.
- Evitar exposición al sol: Se recomienda evitar que los trabajadores salgan a zonas descubiertas durante las horas centrales del día, a menos que sea estrictamente necesario. Proporcionar áreas de sombra o implementar medidas para proteger a los empleados del sol directo ayudará a minimizar el riesgo de golpes de calor y quemaduras solares.
- Suministrar ropa adecuada: Proporcionar a los trabajadores ropa adecuada que les permita estar más cómodos y protegidos del calor. Se recomienda utilizar ropa ligera, transpirable y de colores claros para ayudar a mantener una temperatura corporal más fresca.
- Fomentar la hidratación y el frescor: Disponer de medios para que los trabajadores puedan hidratarse con agua fría y mantenerse frescos. Se deben proporcionar suficientes puntos de acceso a agua fresca y potable, así como facilitar la refrigeración del agua en días especialmente calurosos. Además, se pueden implementar ventiladores o sistemas de enfriamiento para mantener un ambiente más fresco en el taller.
En el caso específico de los talleres que brindan servicios de asistencia en vía pública, la situación puede complicarse. Sin embargo, una posible solución es realizar rotaciones de trabajadores para evitar una exposición prolongada al calor. Asimismo, trasladar el vehículo al taller para llevar a cabo las reparaciones necesarias puede ser una opción para minimizar la exposición al calor.
Es fundamental que los talleres tomen en cuenta estas recomendaciones y adopten las medidas preventivas adecuadas para proteger la salud y el bienestar de sus trabajadores durante los períodos de altas temperaturas típicas del verano. Conepa y ASBOC reiteran su compromiso con el fomento de las medidas que garantizan un entorno laboral seguro y saludable.