La llegada de la electrificación y los vehículos autónomo se ha ensanchado para dar cabida a nuevos operadores. Las empresas tecnológicas están encontrando una oportunidad de negocio que no pueden dejar escapar: un nuevo campo con unas nuevas reglas que ya conocen, por lo que la experiencia que aportan de su sector les permite encajar en esta nueva industria.
Con Apple y Google metidas en esta 'guerra' (ya comentamos que el de la compañía de la manzana acumulaba un nuevo retraso), la primera en golpear parece que será Xiaomi, el fabricante chino de móviles y de otros productos electrónicos, que ha anunciado que tiene listo su primer coche eléctrico y que comenzará la producción en serie a principios de 2024 tras superar todas las pruebas pertinentes. Lo ha anunciado Lei Jun, el fundador de la compañía, durante una sesión de la Asamblea Nacional Popular.
Lei explicó en una reunión plenaria de la delegación de Pekín que el “progreso” en la producción del coche de Xiaomi ha “superado las expectativas”. “El vehículo ha completado con éxito la prueba de invierno y se espera que se lance el próximo año”, afirmó el también delegado de la ANP, que además agregó que la producción en masa comenzaría “la primera mitad del 2024”.
Inversión de 10.000 millones de dólares
El ejecutivo declaró que dedica “la mitad de su tiem5rpo” al negocio de los automóviles, en el que invirtieron en 2022 más de 3.000 millones de yuanes (434 millones de dólares, 408 millones de euros) con un equipo de I+D que superó las 2.300 personas.
En marzo de 2021 la tecnológica anunció su entrada en el sector de los vehículos eléctricos con la creación de una filial, encabezada por el propio Lei, que invertiría unos 10.000 millones de dólares (8.515 millones de euros) a lo largo de los siguientes diez años.
Xiaomi ya fabrica algunos vehículos eléctricos de pequeño tamaño como patinetes, y también se asoció con la firma china Super Soco para producir conjuntamente motos eléctricas.