El precio de los automóviles nuevos ha subido un 40% en el periodo acumulado de los últimos cinco años, frente a un IPC del 15,3%, según ha alertado la organización de consumidores. Las subidas se han acelerado en los últimos meses debido al repunte de la inflación y a la prioridad del sector para vender los modelos más caros.
Ayuda a coches usados ecológicos
La entidad ha advertido de que la activación de las Zonas de Bajas Emisiones, que tenían que estar listas en 2023 pero se han retrasado, obligará a muchos usuarios a sustituir su viejo automóvil sin etiqueta ambiental de la DGT por otro vehículo más nuevo que pueda circular por las ciudades.
En ese contexto, ante la dificultad de acceder a un turismo nuevo, la organización considera que sería bueno ampliar el Plan Moves 3, actualmente restringido a vehículos eléctricos e híbridos enchufables nuevos, también a coches de segunda mano con etiqueta Eco o Cero Emisiones.
También cree que debería considerarse la idea de ampliarlo a híbridos no enchufables, ya sean nuevos o de segunda mano, ya que suelen ser más baratos, poco contaminantes y existe una mayor oferta de ellos en el mercado de automóviles usados.
Actualmente, las ayudas son de 4.500 euros para automóviles eléctricos (7.000 euros si se entrega a cambio un vehículo de más de 7 años para achatarrar) y de 2.500 euros para híbridos enchufables (5.000 euros si se entrega a cambio un vehículo de más de 7 años para achatarrar).
Esta propuesta coincide en parte con la que ha planteado el sector del automóvil de dar subvenciones también a la sustitución de un coche viejo por otro más joven aunque sea de combustión.
Cambio de las etiquetas de la DGT
La organización también ha pedido a los ayuntamientos con ZBE que faciliten al menos tres entradas al año a los conductores con un coche sin etiqueta de la DGT. Esta medida tendría un impacto medioambiental muy limitado y, a cambio, facilitaría la entrada a los residentes en caso de urgencia (por ejemplo, para acudir al hospital), además de a los turistas que esporádicamente visiten la ciudad.
No obstante, la OCU mantiene su petición al Gobierno para que se modifique el actual sistema de etiquetas ambientales de la DGT, de modo que priorice las emisiones reales frente a la tecnología del motor. En este sentido, explica que "la mayoría de los nuevos vehículos diésel o gasolina contaminan menos que los híbridos enchufables pesados y de gran cilindrada, y que muchos semihíbridos, en los que el motor térmico actúa como impulsor principal y que tienen un motor eléctrico que asiste al otro en determinadas circunstancias".