Sin embargo, los automovilistas no ponen toda la atención que deberían a este sistema a la hora de cuidarlo, ya que la categoría 'Ejes, Ruedas, Neumáticos y Suspensión' es, de hecho, el segundo capítulo en el que más defectos se detectan en la ITV, ocupando el 21% del total de defectos graves detectados durante el año 2021, de acuerdo con los datos publicados por el Ministerio de Industria.
Por ello, desde la Asociación Española de Entidades Colaboradoras de la Administración en la Inspección Técnica de Vehículos AECA-ITV explican que la comprobación del correcto funcionamiento del sistema de suspensión puede ahorrar más de un susto en la carretera.
No en vano, "un amortiguador o un muelle en mal estado puede provocar que el vehículo tenga una baja adherencia en las curvas, aumentar la distancia de frenado o derivar en la pérdida de la dirección del vehículo", señalan.
Los vehículos que tienen más fallos en la suspensión
Por tipo de vehículo, los datos muestran que los furgones y camiones de menos de 3.500 kg son en los que más defectos graves en el sistema de suspensión se detectan, representando el 85% del total. Le siguen los autobuses, donde el 83,6% de los defectos corresponden a este sistema. Ya en tercer lugar están los turismos en los que la cifra alcanza el 82,3%.
Por su parte, los vehículos agrícolas son los que mejor tienen el sistema de suspensión, pues únicamente el 22,8% de los defectos detectados en la ITV a este tipo de vehículos corresponden a este sistema.
¿Cómo saber si la suspensión funciona correctamente?
Desde AECA-ITV explican que, en el caso de los amortiguadores, el desgaste es progresivo, por lo que es difícil diferenciar durante la conducción si estos deben ser sustituidos por unos nuevos, salvo si se tiene cierta experiencia en el comportamiento del vehículo con los amortiguadores en mal estado. Sin embargo, existen algunas pautas para su detección.
Uno de los síntomas de este desgaste es que el vehículo tendrá un rebote excesivo. Una de la forma más sencilla de confirmar este problema, en aquellos vehículos en los que es posible realizarlo, como los turismos, motocicletas y algunas furgonetas, es empujar hacia abajo la carrocería del vehículo en cada una de las ruedas y, si los amortiguadores están en buen estado, el vehículo debería recuperar su posición original sin ningún tipo de rebote. En caso contrario, es un claro síntoma de que ya no están haciendo su correcta función y hace falta sustituirlos.
Por otro lado, los baches y las curvas son los eventos en los que el sistema de suspensión recibe un mayor estrés. Si al pasar por ellos, se escucha algún tipo de ruido extraño o un efecto de oscilación del vehículo, no se puede dejar pasar. Es muy probable que la suspensión esté dañada.
Los defectos más impactantes en el sistema de suspensión
La asociación de las ITV ha recopilado una serie de fotografías captadas por los inspectores de distintas estaciones de la inspección técnica de vehículos a nivel nacional que muestran los defectos graves o muy graves en el sistema de suspensión con los que algunos vehículos se presentan para realizar la prueba. Estas son algunas de dichas imágenes: