Así lo recoge la última entrega del tradicional informe que elabora la Asociación Española de la Carretera (AEC). "Es el único de este tipo que se realiza de forma privada y que se pone a disposición de todos" señaló el presidente de la AEC, Juan Francisco Lazcano. De hecho, señaló que ese mal estado de las vías también influye en el bolsillo de los ciudadanos, ya que aumenta el consumo y las emisiones en al menos un 10%.
"La carretera es un servicio público de movilidad, abierto 24 horas al día 365 días al año", añadió Lezcano, quien recordó la escalada de precios de las materias primas y "el estudio no es ajeno a ello, por lo que las necesidades están evaluadas a precios de hoy. Sin esa subida, las inversiones habría sido más próximas a los 8.500 millones.
Además, también se ha tenido en cuenta la bajada del tráfico por la pandemia en 2020 y, en menor medida, en 2021 lo que redujo el impacto sobre el estado de las vías". Por ejemplo, en 2020 se registraron 132 millones de desplazamientos medios (una cuarta parte menos), con un descenso del trafico en las autopistas del 40%.
Menos tráfico en 2020 y 2021
Por su parte, Jacobo Díaz, director general de la AEC, precisó que las inspecciones son visuales, por lo que no se conoce el estado de las capas más profundas donde causa más efectos el agua. "Por eso, se trata de reponer lo que vemos, así que esas estimaciones son conservadoras".
En el último estudio, dado a conocer en 2020, esas necesidades se cifraron en 7.500 millones de euros. Además, el trabajo recogía que uno de cada 10 kilómetros de la red presentaba deterioros relevantes en más del 50% de la superficie del pavimento, acumulando baches, roderas y grietas longitudinales y transversales.
3.000 tramos examinados
Los trabajos fueron llevados a cabo durante seis meses el pasado año. En este tiempo, 14 técnicos de la AEC examinaron 3.000 tramos de carretera, de 100 metros cada uno, seleccionados aleatoriamente tanto en la red del Estado como en la dependiente de las CCAA y Diputaciones Forales.
En total, se inspeccionaron tres millones de metros cuadrados de pavimento, 3.000 señales verticales de código, 900 kilómetros de marcas viales, 200 kilómetros de barreras metálicas y 20.000 elementos de balizamiento. En total, más de 400.000 datos, que dan un fuerte rigor al muestreo, señaló Elena Peña, Subdirectora general de la AEC.
En el Informe sobre las Necesidades de Conservación 2021-2022 dado a conocer ahora, se establece un reparto de los gastos en función de la titularidad de la vía. Así, la parte estatal tendría que hacer frente a un desembolso de 3.260 millones de euros (sobre todo en firmes), mientras que los 6.600 millones restantes correrían a cargo de las comunidades y diputaciones forales.
En este sentido, la última partida aprobada por el Ministerio de Transportes para la red estatal fue de algo más de 1.300 millones de euros en los presupuestos de 2022. Según la AEC, habría que mantener de forma continuada un gasto de entre 1.600 y 1.800 millones de euros anuales.
Además, habría que reponer hasta 360.000 señales verticales. Sí se ha observado una ligera mejora en la señalización horizontal, mientras que en el caso de las barreras de seguridad están en un estado aceptable (cinco puntos sobre 10). Es muy importante este aspecto, ya que hasta el 40% de los accidentes mortales son por salidas de la vía. El indicador es solo aceptable.
Grave deterioro desde 2009
En términos generales, el estudio revela cómo la falta de conservación está haciendo mella en las infraestructuras viarias españolas, un patrimonio valorado en 220.000 millones de euros. Se viene haciendo desde el año 1985 y, hasta comienzos de este siglo, cumplían holgadamente con las necesidades de conservación,, con una valoración de 238 sobre 400. Pero su estado se ha ido deteriorando desde 2009 a causa de los sucesivos y reiterados ajustes en los presupuestos públicos hasta conseguir su peor nota histórica.
Una situación que el actual Gobierno quiere compensar estableciendo el peaje por uso en las vías que ahora son gratuitas. En este sentido, el presidente de la AEC dijo que, al tratarse de un servicio público esencial, el establecimiento de tasas de pago por uso "no es ninguna locura".
A 31 de diciembre de 2019, en España existían 165.445 kilómetros de carreteras. De ellos, 26.466 km eran de titularidad estatal, un 16% del total aunque concentran el 52,4% del tráfico total y el 64,6% del tráfico pesado. Además, hay 71.205 km gestionados por las CCAA (42,4% del tráfico) y 67.773km por las Diputaciones y cabildos (que suponen el 5,2% del tráfico restante). (5,2% del tráfico restante).
La clave de esto es que la red estatal supone también la gran mayoría de los kilómetros de vías de gran capacidad (autopistas de peaje, autopistas libres, autovías y carreteras multicarril): 12.035 de 17.377.