La mayoría de estos vehículos presentaron defectos en el alumbrado y la señalización, la causa más común en los defectos graves detectados. El tipo de vehículo que más defectos tuvo en este capítulo fueron los ciclomotores: de los casi 2.000 inspeccionados, el 10,33% presentó defectos graves en estos sistemas, que pueden deberse a fallos en la luz de marcha atrás, los intermitentes o llevar las luces sin homologar.
En cuanto al total de vehículos rechazados sobre el conjunto común de defectos, los vehículos pesados fueron los que presentaron el mayor índice de rechazo, con un 27,6%, mientras que los turismos están dentro de los vehículos que menos porcentaje de rechazo, con un 17,2%.
En total, el 18% de los vehículos no pasó la primera inspección y solo el 6,3% fue rechazado en inspecciones posteriores, por lo que Aema-ITV aprecia, en líneas generales, una correcta subsanación de los defectos graves detectados en la primera inspección.
Respecto a la antigüedad, los turismos particulares con más de 15 años tuvieron un 23% de rechazos; los de 10 a 15 años, un 16,78%; los de 5 a 10 años, un 9,46%; y en los de menos de 5 años, solo un 6,34% presentó defectos. “Estos datos muestran la importancia del correcto mantenimiento de los vehículos más antiguos, que muchas veces necesitan más cuidado”, reconoce Soriano.
Otros sistemas donde se han detectado defectos graves han sido en los ejes, ruedas, neumáticos y suspensión y en las emisiones contaminantes. Durante el primer trimestre del año, un 5,3% de los turismos particulares mostró el mayor índice en este último. Frente a esta situación, la Comunidad de Madrid busca rebajar los niveles de óxidos de nitrógeno un 20% para el próximo año.
La mayoría de los defectos detectados en emisiones contaminantes fueron considerados graves, en concreto en 32.670 vehículos, de los que 25.997 se detectaron en turismos particulares y 3.592 en vehículos de transporte de mercancías de menos de 3.500 kg.
El alto absentismo a la hora de pasar la ITV en el último año es preocupante para la seguridad vial y esta tendencia se mantiene. Jorge Soriano, presidente de Aema-ITV, recalca la importancia de este proceso al que deben someterse obligatoriamente todos los vehículos. “La ITV evita más de 500 muertes al año, una cifra que cobra especial relevancia en un contexto en el que los fallecidos por siniestros viales en los que se vieron implicados vehículos sin ITV están aumentando”.
La asociación madrileña, alineada con la campaña “Si no pasas, pásala” impulsada a nivel estatal por Aeca-ITV, busca seguir concienciando de la importante labor de la ITV en salvar vidas.
Según el último estudio de la Universidad Carlos III de Madrid, las estaciones de ITV evitan al año 539 víctimas mortales, que podrían ser 700 si todos los vehículos con obligación de realizar la ITV, la tuvieran en vigor.