A partir del 1 de enero del año que viene va a entrar en vigor la Ley de Garantías de la Unión Europea, que modifica la cobertura de la que gozan los coches de segunda mano. Si bien hasta ahora estos vehículos estaban cubiertos con un año de garantía en concesionario durante la cual, en caso de avería, el comprador tenía que demostrar que esta había tenido su origen antes de la compra, con la nueva normativa cambian las cosas.
De este modo, los vendedores, según publica 20 minutos, deberán pagar la reparación de cualquier avería que se produzca durante esos 12 meses si no estaba ya reflejada en el contrato de compraventa.
Para entender estos cambios legislativos, Marco Conde, CEO de Motoreto (plataforma dedicada a la compraventa de VO), explica algunas de las cuestiones clave para entender la nueva Ley de Garantías.
¿En qué consiste este nuevo cambio de la ley? Destacan dos grandes aspectos de la nueva ley que afectan de forma directa al sector de los coches de ocasión.
El primero es que los compradores pueden hacer una reclamación durante 12 meses si en el coche adquirido encuentran un fallo que no venía reflejado en el contrato, los denominados "vicios ocultos" (habrá que demostrarlo, según la Ley).
El segundo está relacionado con los años de garantía del vehículo. Con esta ley habrá que ofrecer 2 años salvo que de forma fehaciente quede reflejada otra duración en el contrato de compraventa entre concesionario y comprador.
Diferencias con la legislación anterior
La principal gran diferencia viene dada por el tiempo de la garantía. Anteriormente, explica Marco, podía usarse una letra pequeña y alegar un "acuerdo verbal" entre comprador y vendedor para reducir la garantía del coche de dos a un año. Ahora, con la nueva ley no cabe la posibilidad de usar estas técnicas. A no ser que haya quedado claramente estipulado en el contrato, la garantía será de 2 años.
¿Y cómo beneficia al comprador? Le da más de seguridad a la hora de compra un coche de ocasión, ya que obliga al comprador a aumentar y aclarar la garantía que ofrece, señala el CEO de Motoreto. Pero, por otro lado, es un arma de doble filo porque se esperan muchas más reclamaciones por parte de los compradores, (durante esos primeros 12 meses) y habrá muchos que se aprovecharán de esta situación para apretar al concesionario.
Todo esto ¿puede repercutir positivamente en este mercado? No está tan claro que repercuta de forma positiva, confiesa Marco, sobre todo en cuanto a volumen de ventas se refiere. Es más, se habla de que puede haber un incremento de precios en los coches de segunda mano, que además es un mercado que cuenta con una alta demanda.