Esta tasa de rechazo (4,05 millones de vehículos) obedece a que durante las inspecciones se detectaron hasta un total de 17.176.021 defectos, de los cuales 11.050.977 eran graves. El promedio de errores graves detectados por vehículo rechazado es de 1,9 defectos por vehículo, ya que en muchos de ellos se detectaron más de un defecto grave.
En 2019, la categoría en la que más defectos graves se encontraron fue la de alumbrado y señalización (27,5%), seguida de ejes, neumáticos y suspensiones (17,8%); exceso de emisiones contaminantes (13,6%); y los relativos a frenos (12,03%).
Por tipo de vehículos, los que presentaron mayores defectos graves fueron camiones, remolques, semirremolques y autobuses, y furgonetas. En concreto, de todos los camiones, remolques, autobuses y furgonetas que fueron a realizar la primera ITV se rechazaron el 30,28%, 14,2%, 26,9% y 25,2%, respectivamente. El motivo, según Aeca-ITV es que la antigüedad del parque de estos vehículos es mayor que la edad media del parque circulante, salvo en el caso de autobuses. En cuanto a motos y quads, se presentaron a la primera inspección 732.820, de los que fueron rechazados el 21,98% (161.091).
En segundas inspecciones, a las que los vehículos rechazados están obligados a presentarse, el número de vehículos que recibieron una inspección favorable —tras corregir las deficiencias técnicas graves que se les detectaron— fue de 3.374.390, mientras que el porcentaje de rechazados en segunda o posteriores inspecciones fue del 7,75% (313.696 vehículos).
Según recuerdan desde la asociación de empresas de ITV, “está prohibido circular con una ITV desfavorable salvo para su traslado al taller o para acudir a la ITV a una nueva inspección técnica, una vez subsanado el defecto detectado. En el caso de que el defecto localizado suponga un riesgo para los ocupantes del vehículo o para el resto de los usuarios de la vía pública, éste ya no podrá circular por sus propios medios ni siquiera para ir al taller”.
Excesivo absentismo
El sector ha mostrado su preocupación por las altas tasas de absentismo en la ITV y que suponen un grave riesgo. El 20% de vehículos no pasa la ITV reglamentaria, dato que se dispara en el transporte de última milla y motocicletas/ciclomotores. En las furgonetas, el nivel de absentismo alcanza el 40%, lo que supone que cerca de 2,2 millones de este tipo de vehículos circulan sin la correspondiente inspección en vigor. Además, y según datos de la DGT, el 10% de las furgonetas implicadas en accidentes de tráfico con personas fallecidas no tenían vigente la ITV. Este dato se incrementa a un 16% en las furgonetas de más de 20 años de antigüedad.
Según el estudio "Contribución de la Inspección Técnica de Vehículos a la Seguridad Vial", realizado por el Instituto de Seguridad Vial de los Vehículos Automóviles Duque de Santomauro (ISVA) de la Universidad Carlos III de Madrid, las estaciones de ITV evitaron en un año 536 víctimas mortales, cerca de 12.000 heridos de distinta consideración y al menos 17.700 accidentes de tráfico. Este mismo estudio afirma que si el 20% de los vehículos que no acudieron a las inspecciones obligatorias lo hubieran hecho, podrían haberse evitado al menos 8.800 accidentes, cerca de 7.200 heridos y 161 muertes adicionales.
“Teniendo en cuenta el incremento del absentismo que estamos detectando en el año 2020, a pesar del esfuerzo realizado por los operadores de ITV para ofrecer el servicio requerido tras el estado de alarma, la previsión es que suframos un aumento de accidentes de tráfico que, como sociedad y como individuos, no nos podemos permitir”, concluyen desde Aeca-ITV.