Una de las características del desconfinamiento ha sido el incremento del uso del vehículo privado en detrimento del transporte público por el miedo a las aglomeraciones y posibles contagios. En este sentido, conforme las distintas provincias de España han ido avanzando de fases, los servicios de asistencia en carretera han tenido un proceso paralelo de desescalada.
No en vano, según datos de Asitur Focus, durante el mes de mayo el número de servicios de asistencia en carretera tan solo ha sido un 1,3% inferior frente al mismo mes de 2019.
Este descenso ha sido algo más acusado en las provincias que estaban en una fase más retardada (Madrid, Barcelona y las provincias de la Comunidad de Castilla y León) con un 6% menos de servicios que el año pasado, mientras que en el resto de España incluso se produjo un ligero incremento del 0,4%.
Dentro del primer grupo de provincias, el mayor descenso se localizó en Segovia, con un 21% menos de servicios, mientras que en el grupo de provincias que han tenido una desescalada más rápida, la que ha registrado un incremento mayor de los servicios de asistencia en carretera ha sido La Rioja, con un 30%.
La batería, 'reina' de las asistencias
A pesar de que la movilidad todavía no alcanzado sus niveles habituales, este importante volumen de servicios se explica, según los responsables del estudio, "por el repunte tan acusado que están teniendo las asistencias por baterías. Este tipo de servicios, ya de por sí el más frecuente en asistencia en carretera, se ha incrementado un 143% durante el mes de mayo".Esta tendencia la ha registrado también el Race, ya que, entre los meses de marzo, abril y mayo de 2020, la red del club automovilista tuvo que solventar 78.000 averías 'in situ' relacionadas con la batería del coche, el tipo de avería más frecuente, frente a las 52.000 de los tres meses del año anterior, a pesar de que la caída de la movilidad superó el 50% durante el período.
Precisamente, con la desescalada y tras semanas de parada forzada de muchos vehículos, el mes en el que más percances se registraron fue mayo, cuando se alcanzaron un total de 36.652 percances sólo de baterías, frente a los 17.232 que se registraron durante todo el mes de mayo del año pasado, lo que supone un incremento también de más del 100%.
Por provincias, Madrid fue para el Race la que registró, en mayo, el volumen más alto de reparación en el lugar del percance, con más de 7.000 intervenciones, frente a las 3.100 registradas durante el mismo mes del pasado año.
Desde enero, el número de expedientes relacionados con baterías resueltos en el lugar del percance ascienden a 121.700, una cifra que, a pesar de los meses de confinamiento y restricciones para el uso del vehículo, es muy superior a la registrada en los cinco primeros meses del año anterior, que llegó a sumar 92.618.