Y es que el uso del transporte privado puede verse beneficiado por el temor a los contagios y a compartir el espacio reducido de los autobuses y trenes con los demás usuarios.Todas las previsiones apuntan a que los sistemas de movilidad individual se impondrán a los colectivos e incluso a los vehículos compartidos en las primeras fases de desconfinamiento hasta el punto de que un 43% de los españoles entrevistados se plantea la compra de un coche en el corto o medio plazo, según un estudio elaborado por EY-Parthenon.
En Andalucía y Valencia casi la mitad de los entrevistados compraría un vehículo propio (49% y 48%, respectivamente) y en Galicia el porcentaje alcanza el 44%, frente a País Vasco (34%), Castilla y León (36%), Comunidad de Madrid (38%), Castilla – La Mancha (40%) y Cataluña (41%), que se plantean esta inversión en un porcentaje más reducido.
Por tipología de familia, aquellos que tienen niños estarían más dispuestos a comprar un coche nuevo, mientras que los más jóvenes se decantan por uno de segunda mano.
Uso del transporte privado
Ésta podría ser la consecuencia, positiva para la industria de la automoción, de que un 27% afirme que usará más o mucho más el coche privado que antes de la pandemia sanitaria. Sin embargo, los servicios de carsharing, VTC, taxi y transporte público se verán afectados por el coronavirus ya que registrarán caídas de usuarios del 55%, el 46% y el 37%, respectivamente.
Por Comunidades Autónomas, Cataluña junto con Andalucía —con 9 de cada 10 usuarios cada una— serán las que más se refugiarán en el vehículo privado durante esta primera etapa. Mientras, el taxi y VTC seguirá siendo una opción mayoritaria para los ciudadanos de Madrid, un 66% hará un uso igual o mayor al inicio de la crisis. De la misma manera, el transporte público se impondrá en la Comunidad de Madrid (74%), el País Vasco (69%) y Castilla-La Mancha y Cataluña (ambas con el 65%).
Para David Samu, socio responsable de EY-Parthenon, “las comunidades autónomas donde hay margen a la movilidad en coche privado, los consumidores se plantean la compra de un vehículo, lo que podría ser una excelente noticia para la industria de la automoción, una de las más afectadas por esta pandemia”.
Escenario poscrisis
Estos escenarios cambiarán una vez superada la crisis sanitaria. En ese momento, los españoles recuperarán sus hábitos de movilidad para ir a trabajar. Si antes de la crisis un 46% iba en coche, superada esta situación el 45% volverá a elegir como prioritario el uso del vehículo privado.
Por su parte, un 15% irá en transporte público, frente al 18% que lo hacía antes, un 23% irá andando —un punto por encima que antes de la crisis— y un 14% elegirá otro método de transporte, frente al 11% registrado previo a la crisis.