Este informe concluye que España se sitúa en última posición en cuanto a desarrollo de infraestructuras de recarga mientras que en la Europa de los 15 la instalación de puntos de recarga tanto públicos como privados cogen velocidad. Europa sube 3 puntos en cuanto a penetración de la electro-movilidad en su parque, mientras que España crece más despacio que el resto de los países.
El indicador global de electro-movilidad del Barómetro (que valora tanto la penetración de vehículos eléctricos como de infraestructuras de recarga) estima que la media europea se sitúa en 27,9 puntos sobre 100, con un crecimiento de 3 puntos, mientras que la media española solo crece 3 décimas respecto al trimestre anterior, con una valoración de 16,4 puntos. De este modo, se coloca por primera vez en última posición frente a otros países europeos. El escaso desarrollo de las infraestructuras y la necesidad de incrementar el ritmo de entregas de estos vehículos, en un entorno de caída general de las matriculaciones, justifican este avance más lento.
En cuanto al territorio nacional, Cataluña, Asturias y Madrid permanecen en las primeras posiciones del Indicador global de electro-movilidad. En este último trimestre de 2019, Asturias y Madrid bajan su valoración respecto al periodo anterior, por el menor desarrollo de las infraestructuras de recarga, lo que permite a Cataluña colocarse en primera posición con 23,4 puntos sobre 100.
Ventas de coches eléctricos y electrificados
Así, aunque las ventas de vehículos eléctricos puros e híbridos enchufables continúan creciendo en los últimos meses, su ritmo ha sido más lento y está aún muy por debajo de la media UE-15 (27,9 puntos). Y esto a pesar de que casi todas las Comunidades Autónomas, menos Cantabria —Aragón se unión a mediados de 2019—, han contado con el Plan Moves de incentivo para la adquisición de vehículos electrificados. A cierre de 2019, todavía quedaban por consumir algo más de 7 millones de euros asignados al Plan Moves 2019.El Plan, según ANFAC, no ha tenido la eficacia deseada para las matriculaciones de vehículos por la puesta en marcha escalonada en función de la Comunidad Autónoma y por el requisito obligatorio de achatarramiento de vehículo de más de diez años para poder acceder a las ayudas de adquisición de vehículos eléctricos, requisito que impide a las empresas acceder a las ayudas.
Puntos de carga
España ha crecido 6 décimas en el indicador de penetración de infraestructuras de recarga, según el Barómetro, alcanzando los 16,7 puntos. A pesar del aumento, respecto al anterior trimestre, todavía se registra un crecimiento lento en comparación con la media de UE-15, que se sitúa diez puntos por encima de la media española, con 27,3.Italia, que en el anterior trimestre de 2019 ocupaba la última posición, gracias a su apuesta decidida por la electro-movilidad y su intenso impulso de las infraestructuras de recarga, ha logrado una valoración de 43,8, situándose por encima de la media de la UE-15.
Por otra parte, Noruega, Holanda y República Checa se consolidan en las primeras posiciones del ranking, superando o aproximándose a los objetivos fijados. Cabe destacar el ejemplo de la República Checa que ha duplicado su valoración, hasta los 183,6 puntos, en el indicador de infraestructura de recarga, lo cuál la afianza en la tercera posición del ranking europeo.
Respecto al despliegue en las comunidades autónomas, Cataluña asciende a la primera posición con un grado de cumplimento de 26,4 sobre 100, en detrimento de Asturias, que baja su valoración 6 puntos para alcanzar los 26,3. Durante el cuarto trimestre, la mayoría de las comunidades autónomas han crecido o se han mantenido en su puntuación del ranking.