El reglamento, como ya hemos explicado en la web de Asboc, contempla aspectos importantes relacionados con el mercado posventa, entre ellos el derecho del usuario a la libre elección de taller cuando abona él la factura, el acceso a la información técnica y la definición de las piezas de recambio originales y de calidad equivalente.
Con estas consultas, la Comisión quiere conocer los efectos reales que ha tenido esta norma en el mercado desde su entrada en vigor con el objetivo de trabajar en el marco jurídico que regulará la posventa europea cuando expire su período de validez, el 31 de mayo de 2023.
Según Conepa, la experiencia práctica en España del Reglamento 461/2010, valorado "siempre positivamente" por la Federación, "ha resultado especialmente favorable al taller independiente. Los estudios de diferentes consultoras demuestran que la cuota de este subsector de la posventa, tradicionalmente mayoritario en cuanto a operaciones y facturación realizadas, se ha incluso incrementado en los últimos años en el global del mercado".
Libre elección de taller
Respecto al derecho que tiene el usuario de elegir taller, cuando es él quién abona la factura bajo el principio general “Quien paga, manda”, sujeto a las directrices que marca el constructor del vehículo, Conepa considera que "es todavía una cuestión bastante desconocida por parte de los usuarios de vehículos, muchos de los cuales muestran inseguridad sobre el alcance de ese derecho y prefieren ser conservadores y esperar a que finalice el período de garantía legal antes de recurrir a un taller no ligado a la marca para hacer cualquier tipo de operación en su coche".Para la Federación, "resulta fundamental seguir incidiendo en ello e informando correctamente tanto desde el taller, por su proximidad al cliente, como desde las propias instituciones vinculadas al consumidor, con el objetivo de que este decida lo que considere más adecuado, pero con un buen conocimiento de sus derechos amparados en el marco legal". Conepa estima que en los dos primeros años de vida algo más del 80% de las revisiones se realizan siempre en talleres marquistas.
Además, en los últimos años se ha producido, por parte de los constructores de vehículos, una tendencia hacia la extensión del período de garantía legal mediante “garantías comerciales extendidas”, voluntarias y libremente aceptadas por los automovilistas. A través de ellas, se contemplan los mantenimientos en la red del fabricante del automóvil.
En la práctica, Conepa, directamente o a través de sus asociaciones, "ha atendido en estos años solo dos centenares de casos en los que talleres asociados se han visto con problemas planteados por sus clientes por supuestas pérdidas de garantía de vehículos debidas a la realización de revisiones fuera de la red oficial. Normalmente, esto se ha producido tras ocasionarse una avería sujeta a garantía y sin relación directa con las operaciones de mantenimiento realizadas en el vehículo. En la práctica totalidad de los casos, y después de comprobar que dichas operaciones se habían hecho respetando las directrices del constructor, los supuestos problemas se han solucionado por la vía amistosa, sin haber tenido necesidad de recurrir a los tribunales de justicia".
En sintonía con lo anterior, la entidad de la que Asboc es miembro "ha considerado importante hacer notar en el informe el progresivo uso de libros digitales de mantenimiento, en los que anotar las revisiones obligatorias para no perder la garantía legal, soportes que van ganando terreno a los formatos de papel tradicional y que pueden suponer barreras para los talleres multimarca independientes".
Acceso a la información técnica
En cuanto al acceso a la información necesaria para reparar, Conepa "aplaude no solo los contenidos al respecto del Reglamento 461/2010, sino en el resto de la normativa europea que avala este punto y especialmente el Reglamento UE 2018/858 del parlamento y del Consejo sobre la homologación y la vigilancia del mercado de los vehículos de motor y sus remolques y de los sistemas, los componentes y las unidades técnicas independientes destinados a dichos vehículos, por el que se modifican los Reglamentos (CE) nº 715/2007 y (CE) nº 595/2009 y por el que se deroga la Directiva 2007/46/CE".En este sentido, la Federación considera "especialmente interesante" que la normativa europea continúe "avalando y reforzando la figura de los proveedores de información técnica, agregadores de contenidos que posibilitan a través de una plataforma el acceso a información técnica de diferentes constructores de vehículos. Dado el pequeño tamaño de las empresas del sector (la media no llega a los tres trabajadores por empresa), éste es el medio más sencillo y económico para que cualquier taller pueda acceder a información técnica de calidad".
Redes oficiales
Por lo que se refiere a la opinión de los asociados pertenecientes a redes de fabricantes de vehículos, Conepa señala que el análisis estadístico de evolución del sector en los últimos años "muestra un progresivo descenso de los talleres autorizados por los fabricantes de vehículos en favor de los grandes grupos de distribución, con contratos de venta y posventa de automóviles de diversas marcas. En resumen, la venta y posventa marquista está hoy en menos manos que lo estaba hace unos años".Asimismo, desde la Federación se apunta que tienen conocimiento de que en torno a 50 ocasiones se han detectado "problemas para recibir información sobre los estándares para formar parte de la red. Asimismo, ha habido quejas repetidas sobre la imparcialidad de las auditorías realizadas para optar a ser taller marquista o para continuar perteneciendo a una red".
Por otra parte, la entidad también constata que "si uno de los objetivos de la Comisión Europea era el de conseguir que en unas instalaciones comunes pudieran ofrecerse servicios de posventa multimarca con conexión contractual con el constructor, la experiencia demuestra que esto no se ha conseguido. Los estándares de la mayoría de las marcas lo hacen imposible".
El reto tecnológico
En su última reflexión hacia la Comisión Europea, Conepa manifiesta que "en este momento y en los próximos años, las instituciones tienen un gran reto. No solo se trata de que las normas jurídicas recojan contenidos coherentes con el objetivo de facilitar la libertad de mercado en el entorno de la UE; también han de ser sensibles a los continuos cambios tecnológicos y a las barreras que, con ellos, las grandes empresas pueden poner a las pymes. Por tanto, las normas jurídicas deben ser lo suficientemente ambiciosas para acompañar la teoría de un contexto jurídico adecuado con las posibilidades técnicas de llevarlo realmente a la práctica. En suma, cumplir la teoría de un mercado más libre sólo será posible si las herramientas para hacerlo están al alcance de todos".Para terminar, la Federación ha querido enfatizar "la gran preocupación en el sector de los talleres, mayoritariamente micropymes, por el hueco que van a tener el mundo de la nueva movilidad".