Para una mejora efectiva del tráfico en las ciudades, este estudio estima que debería aumentar en un 40% el número de coches autónomos en las ciudades. Con los dispositivos electrónicos con los que cuentan estos vehículos, se podría mantener la distancia necesaria con otros vehículos, no conducir demasiado deprisa y responder a las señales de tráfico.
Según datos de este estudio, si la tasa de ocupación aumentase de 1,1 a 1,3 personas por vehículo, gracias a que un mayor número de usuarios compartiría coche, no habría congestiones de tráfico en las horas punta.
Los vehículos conectados, autónomos y compartidos proporcionarían a las ciudades nuevas oportunidades de espacio que mejorarían la calidad de vida. Este estudio ha determinado que, con la incorporación de vehículos completamente autónomos, se podrían adaptar las vías de cuatro carriles por sentido a uno, y emplear ese nuevo espacio para peatones o bicicletas en lugar de vehículos.
Infraestructuras inteligentes
"El resultado ilustra la importancia de considerar la movilidad urbana en un sentido amplio. Para aprovechar al máximo las ventajas de los coches autónomos, son necesarios servicios de movilidad e infraestructuras inteligentes. Por esta razón es importante cooperar con varios sectores involucrados, especialmente en las ciudades", señala Melanie Goldmann, la responsable de Trend Communication en Audi.
En colaboración con el Instituto Fraunhofer de Ingeniería Industrial (IAO), Audi está investigando, por ejemplo, cómo convertir el interior de un coche en un lugar de trabajo. Para los planificadores y diseñadores de Audi, las respuestas a esas preguntas son muy relevantes.
La digitalización del entorno urbano transformará las ciudades, la movilidad y el comportamiento de los usuarios. Los conceptos automovilísticos, sin embargo, se están desarrollando hoy y deberán combinarse de forma inteligente y eficiente con los sistemas de movilidad que se desarrollen en el futuro.