Realidad aumentada, inteligencia artificial, conexión a internet en todas las áreas y equipos de última generación para diagnosis son algunos de los ejemplos que se podrán ir viendo (en algunos casos ya son una realidad) en los talleres. Con ello, se generará un importante volumen de datos, que permitirá diagnosticar problemas y prevenir averías.
El 'último' en poner en marcha un proyecto de este tipo ha sido Porsche, que a finales de mayo comenzó a implantar el uso de gafas de realidad aumentada para acortar los tiempos de reparación de sus vehículos en los concesionarios de su filial en Estados Unidos.
¿Cómo funciona 'Tech Live Look'? El sistema conecta en tiempo real a los técnicos con expertos en remoto para que, a través de las gafas inteligentes, puedan ver lo mismo que el técnico está viendo. Así, el experto puede hacerle comentarios mientras trabaja e incluso "proyectar boletines técnicos paso a paso y dibujos esquemáticos en la pantalla dentro de las gafas del técnico", según explicó Porsche.
Con este sistema, el fabricante alemán de vehículos pretende acortar los tiempos de reparación hasta en un 40% al mejorar la cadena de comunicación. El sistema utiliza gafas inteligentes de Osterhout Design Group y la plataforma de software AiR EnterpriseTM de Atheer, Inc.
Después de realizar varios ensayos piloto exitosos en 2017, inicialmente, el sistema empezó a ser usado en tres de las 189 concesionarias que tiene la marca alemana en EE.UU. El objetivo para finales de este año es que sean 75 las concesiones que ya estén usando esta tecnología, para que la mayoría del resto se una en 2019.
Otros ejemplos
Sin embargo, este no es el único ejemplo de aplicación de nuevas tecnologías que ayudan en el taller.Así, General Motors, ya explicó su 'system prognostic', un sistema de sensores que hace que el propio coche prediga las averías.
Así, batería, motor de arranque y bomba de combustible suministran datos por los sensores ubicados en estos tres puntos y son enviados a los servidores de GM. De esta forma, gracias a una serie de algoritmos se analiza y determina si existe algún daño en el coche. En ese momento, se envía un mensaje para solucionar el problema en el taller.
No obstante, la firma ha desarrollado este sistema para introducir la autorrevisión como un servicio de los coches del futuro.
Por su lado, Tesla ha diseñado un sistema de actualizaciones a distancia que permite diagnosticar casi todos los posibles fallos que tenga el coche, pudiendo solucionar algunos de ellos y concertar una cita con el servicio técnico más cercano para los que deben ser resueltos in situ.
Asimismo, esta aplicación pone en marcha el concepto de técnico a domicilio, en los casos que se requiera una reparación y no exista la posibilidad de ir al taller, si se trata de reparaciones menores.
A esto hay que unir, otras tecnologías desarrolladas por fabricantes de componentes como Bosch y su Connected Repair que conecta las diferentes áreas del taller con todo el equipamiento del automóvil, llevando a cabo el diagnóstico de las averías que se produzcan.