Esta 'guerra' a los motores de combustión, especialmente hacia el diésel y más después del escándalo de Volkswagen, el conocido como 'dieselgate', parece que conllevará su paulatino retroceso tanto en las ventas como en su presencia del parque, si bien, es muy improbable que su total desaparición se vea en el medio plazo.
Los propios fabricantes, a pesar de las estrictas regulaciones sobre emisiones de los coches a las que tienen que hacer frente, tampoco consideran que su 'extinción' se vaya a producir en los próximos años. Aún así, lo que es cierto que es que lo constructores de vehículos, tanto ligeros como pesados, llevan tiempo invirtiendo en I+D para lanzar al mercado automóviles más 'limpios', optando tanto por todo tipo de energías alternativas (autogás o GLP, GNC, pila de combustible —hidrógeno—, eléctricos...).
En este sentido, según el jefe de I+D e ingeniería de Toyota, Seigo Kuzumaki, el motor de combustión interna, ese que sigue moviendo la aplastante mayoría de vehículos con ruedas que circulan por el mundo, estará enterado en 2050. Aún así, según sus predicciones, a partir de 2040 aún servirán para mover un 10 % de híbridos, que todavía tendrán esta cuota de mercado en vehículos nuevos.
Reducir las emisiones
“Creemos que en 2050 tendremos que reducir las emisiones de CO2 de los automóviles en un 90% con respecto a los valores de 2010”, explicó Kuzumaki en una entrevista a la revista de motor británica Autocar. “Para alcanzar ese nivel, ya no se fabricarán motores de combustión interna, salvo quizá para algunos coches híbridos o híbridos enchufables”.Si bien todo apunta a que los motores de combustión interna irán perdiendo cuota de mercado en los próximos años, aún nadie puede predecir qué camino irá tomando la automoción en cuanto a sus propulsores. Lo que es evidente es que durante varias décadas esos nuevos motores seguirán conviviendo con los 'viejos' de combustión que aún se siguen comercializando.
Sin ir más lejos, en lo que va de año, los motores diésel y de gasolina mantienen una cuota alrededor del 95% en las matriculaciones y del otro 5%, la gran mayoría son híbridos también con motores de combustión. Esto indica bien a las claras que su 'desvanecimiento' será lento y progresivo, lo que permitirá a los talleres irse adaptando a las nuevas demandas del mercado, como han ido haciendo a lo largo de los últimos 100 años.